Para crear polémica y vender más libros o no la cuestión es que este sábado Sánchez Dragó, presente en el plató de El Gran Debate donde suele colaborar, acabó abandonando su silla cuando estaba a punto de ser entrevistado por Jordi González por la publicación de su último libro.
Al parecer por estar disconforme con el vídeo de presentación y el enfoque de la entrevista o por indicaciones de su hija, el escritor no quiso regresar al plató. El presentador tuvo que dar explicaciones y animó sin conseguirlo a que recapacitara, entrara y defendiera el motivo de su postura.
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